¿Recuerdas que te contamos que existen las catas de café? Asimismo, te hablamos de que existen dos tipos principales de catas. En esta ocasión, vamos a hablarte de esas características o detalles que se evalúan en una cata de café. ¡Vamos a conocerlos!
El COLOR. El color es la característica más determinante en una cata de café. Y es la primera que puede percibirse. Depende del tipo de café, pero encontramos un rango que va desde el marrón claro hasta casi el negro. Principalmente, depende de la caramelización de los azúcares del café durante el proceso de tostado: cuanto mayor sea el tostado, más oscuro será.
Los AROMAS. El segundo elemento que los expertos atienden a percibir son los aromas del café. Entre los aromas podemos diferenciar los positivos de los negativos. En los positivos o deseados, encontramos los frutales, ácidos agradables, flores, frutos secos, y especias, entre otros. Por otro lado, los no deseados son madera seca, cuero, patata, húmedo, fermento, animal, goma y químico, también entre otros.
El SABOR. Cuando se prueba el café, lo primero que se percibe es el sabor. Primero, aparecerán los dulces, después los salados y, por último, los ácidos y los amargos.
El CUERPO. El cuerpo es un aspecto fundamental a la hora de valorar un café. Se trata de una sensación táctil causada por la densidad de la bebida y por los elementos en suspensión esencialmente grasas y aceites.