«Ya llevo mucho tiempo con esta cafetera…»
«Bueno, compro una goma nueva y.. . ¡Listo! A estrenar cafetera».
¿Te sientes identificado con estas palabras? ¿Alguna vez has pensado que comprando una goma nueva o cambiando la ducha de tu cafetera estás cuidándola como debe? ¡Nada más lejos de la realidad!
En este post, te hemos dejado una fotografía de una ducha de una máquina de café -lugar por donde pasa el agua que llega a la pastilla de café-. Una de sus averías más comunes es cuando el tornillo se rompe dentro del grupo por una vida demasiado prolongada e, incluso, por manipularlo sin los conocimientos suficientes, tanto de mantenimiento como de apriete. Una serie de circunstancias que hacen que, sin duda, el dueño de la cafetera deba repararla.
A veces, sacar el tornillo y sustituirlo por otro es tarea fácil; pero, en otras ocasiones, debemos cambiar toda la pieza. Como ves, un mantenimiento preventivo adecuado nos permitiría evitar roturas innecesarias y males mayores. ¡Como el de este caso!
Hacer un mantenimiento de cafetera no es cambiar la ducha y la goma. ¡Un mantenimiento preventivo es muchísimo más! Somos conscientes de que algunas personas, por ahorro económico, suelen hacerlo. Sin embargo, quizá no saben que es fundamental controlar la vida útil de cada una de las piezas, modificar válvulas de expansión, observar fugas internas… Una serie de factores que un servicio técnico especializado puede contemplar en un par de minutos y ponerle solución lo antes posible.
¿Cuánto tiempo más quieres que te dure tu cafetera? ¡Entonces, el mantenimiento preventivo es la clave!